Arquitectura de la iglesia de reina

De un estilo gótico auténtico, cuya idea y ejecución pertenecen al H. Luis Gogorza,S.J. cuenta con los elementos fundamentales de esta corriente: arco apuntado, altas bóvedas ojivales, paredes reducidas, ventanales amplios y luminosos vitrales.

El retablo es una verdadera filigrana artística fue hecho en Madrid, por el Sacerdote Granda, compuesto de alabastro, madera y bronce, fue traído en piezas y montado en el lugar donde se encuentra bajo la dirección de su autor. Desde la calle frontal Reina, se puede observar la gran imagen del Sagrado Corazón, tallada en madera, cuya base es el Capitel Central que representa la parábola del hijo pródigo y a los dos santos que le hacen guardia: San Ignacio de Loyola y San Francisco Javier.

Dentro del templo, se encuentran hermosos ventanales con deslumbrantes vitrales representando la vida de Jesús, la Virgen María, pasajes de la vida de Ignacio de Loyola y de algunos santos jesuitas.

La iglesia posee una nave central, sustentada en seis columnas laterales rematadas por capiteles ornamentados, los que finalizan en el altar mayor, donde destaca una imagen gigantesca del Sagrado Corazón en actitud de bendecir a los fieles. A derecha e izquierda le hacen compañía dos animados grupos de santos jesuitas, además de otros santos y doctores de la Iglesia. Un conjunto de cinco ángeles, forman con sus alas desplegadas un docelete.

Existe una placa de bronce en el altar de la misa, donde está representado Jesucristo como el cordero degollado y en pie, símbolo de su muerte y su posterior Resurrección, acompañado por una multitud que le canta alabanzas. ​

La parroquia cuenta también, con uno de los órganos, más elegantes de Cuba. El piso de la nave central está hecho por elaborados mosaicos de teselas de piedra y cristal, tiene en su entrada las letras griegas alpha y omega, que significan a Cristo, y ji y ro, C y R iniciales del hijo de Dios en griego. Al final, se encuentra un anagrama antiguo de Jesús en latín: JHS Jesus Homo Salvator (Jesús Hombre Salvador).

Las dos naves laterales forman una cruz latina, una está dedicada a San José, donde se encuentra además una imagen de la Virgen de la Caridad del Cobre, patrona del país, junto con la bandera cubana. El altar de la otra nave está dedicado a la Inmaculada Concepción y es donde se encuentra el sagrario que guarda las hostias consagradas. En el fondo del templo se halla esculpida una imagen de la Virgen de Fátima.